Nicaragua 4×4 Experience

Si bien es cierto, muchos de los costarricenses nos sentimos muy orgullosos de las bellezas de nuestro país, pero es no quiere decir que no estemos deseando salir a descubrir lo que el mundo tiene por ofrecernos.

Hace unos días salimos a descubrir Nicaragua. Creo que la mayoría de los costarricenses vemos a Nicaragua como un país hermano, pero no sabemos las maravillas que se esconden una vez que entramos a sus fronteras.

En Nuestro recorrido, comenzamos realizando el cruce de fronteras por la zona de Los Chiles. Del lado Nicaragua se le llaman a este puesto fronterizo “San Pancho”. Nuestra primera impresión es una mezcla de sentimientos, de tramites obligatorios y hasta cierto punto un tanto tediosos, pero bueno, esto es algo normal de los pasos fronterizos. 

Poco a poco nos fuimos adentrando en este hermoso país. Completamente impresionados con el volcán Cerro Negro, una de las experiencias de Overlanding mas salvajes que hemos vivido hasta el dia de hoy, no solamente por acampar al pie de un Volcán Activo, sino la mezcla de todos los factores favorables para quienes disfrutamos de los recorridos en 4×4 y del Overlanding.

Los pueblos coloniales no se dejaron esperar, León y Granada, dos cuidades con muchísima historia que contar. Sus calles han sido testigos de hechos que han marcado la historia de Nicaragua y del pueblo centroamericano.

Los caminos nos fueron guiando hasta uno de los sitios más emblemáticos de Nicaragua, la Isla de Ometepe y sus maravillosos volcanes Concepción y Maderas. Dos volcanes de formas cónicas, que atraen los turistas mas aventureros de todas partes del mundo. En la isla se vive un ambiente relajante, el tiempo transcurre sin muchos saltos ni bajos, simplemente perfecto para el viajero que busca salir de lo cotidiano y sentirse cerca de la naturaleza.

Después de 8 días ya va siendo hora de volver, pero no sin antes recorrer las playas de San Juan del Sur y El Ostional, hermosos pero muy diferentes entre si.

Habiendo recorrido más de 2000km de recorrido, nos volvemos a encontrar a solo unos pasos de la frontera Costarricense, esta vez del lado de Peñas Blancas con la mente llena de recuerdos y con la expectativa de volver prontamente a seguir descubriendo las bellezas que Nicaragua tiene por ofrecer.